El PJ discute si debate el pliego de Sandleris o se hace el distraído como con Caputo

Luis Caputo se fue con otro récord: su pliego como presidente del Banco Central ni siquiera fue comentado en una reunión de la Comisión de Acuerdos del Senado, que preside Rodolfo Urtubey y se reúne casi una vez por semana.

Mauricio Macri lo envió el 15 de junio pero el salteño nunca sugirió debatirlo, no hubo presión de sus pares del peronismo y mucho menos de Cambiemos, decididos a no obligar a Caputo a explicar la feroz devaluación y la inflación récord.

Venía de una mala experiencia en la casa: el 4 de abril fue a la bicameral de seguimiento de la deuda para justificar sus cuentas offshore y huyó tras una vulgar maniobra, como fue entregarle un papelito a la diputada K Gabriela Cerruti para pedir clemencia.

Las autoridades del Banco Central pueden ejercer «en comisión» sin que el Senado los avale, pero deben abandonar el cargo si una mayoría simple de esa Cámara lo decide.

Si se lo proponía, el bloque justicialista podía sumar al kirchnerismo, los dos puntanos y los dos progresistas, desplazar a Caputo e imponerle a Mauricio Macri las futuras autoridades monetarias.

No lo hizo y el pliego del ex ministro de Finanzas permaneció cajoneado en un Senado que consumió este trimestre en el debate del aborto, la extinción de domino y los allanamientos a Cristina Kirchner, antes de cerrar a la espera del presupuesto.

Acuerdos no estuvo inactivo: aprobó centenares de pliegos de jueces, siempre con la sociedad de Cambiemos y el PJ, que en esa Comisión funciona a la perfección, porque Urtubey y Federico Pinedo definen los temarios a gusto.

Tal es así que en una de las últimas reuniones del bloque justicialista le reprocharon al salteño las decenas de pliegos que se votan a mano alzada sin saber bien quiénes son.

Mañana ingresará el de Guido Sandleris, flamante presidente del Banco Central, y por lo bajo algunas voces del justicialismo decían este miércoles que no podrán cajonearlo otra vez, aunque admitían que una audiencia no ayudará a la paz financiera.

Ante los senadores, Sandleris debería detallar su plan monetario y precisar cuál será el tipo de cambio estimado para 2019, certezas que nadie en el Gobierno tiene por estas horas. «Imagino que ahora que van detrás de la política de megadevaluación del FMI van a revisar el dibujo del dólar a 40.10 del presupuesto», supuso temprano la diputada kirchnerista Fernanda Vallejos.

Los pliegos de las autoridades del Central durante seis años para que puedan trabajar sin presión del presidente de turno, una utopía que ya nadie se cree. Juan Carlos Fábrega y Federico Sturzenegger tenían varios años de mandato pero renunciaron cuando se pelearon con Cristina Kirchner y Macri.

Sólo se resistió Martín Redrado, en aquel verano de 2010, pero se fue antes que la ex presidenta lo echara tras un informe no vinculante del Congreso. Así es el procedimiento, demasiado absurdo para que alguien más vuelva a rebelarse.

También arribará el pliego de Verónica Rappoport, flamante vice segunda del Central y surge un problema: desde 2016 que el PJ no avala más funcionarios del organismo que el presidente, porque reclama al menos un director. Tampoco los rechaza. Y a Cambiemos le alcanza con eso.