Fondo Educativo: Tagliaferro salió a mostrar obras en las escuelas y Descalzo a prometerlas
Luego de la reunión con el ministro de Educación bonaerense y de la marcha opositora de ayer, el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, salió a mostrar obras financiadas por el Fondo Educativo. Su par de Ituzaingó recién las prometió.
En tierra de Vidal, fueron los gremios, centros de estudiantes y dirigentes kirchnertroskistas los que comandaron la protesta frente al Municipio. El gobierno encaró este año unas 50 intervenciones entre Fondo y SAE. Por eso, el jefe comunal salió mostrarse ayer en la Primaria “Brigadier Alberto Sola Claret”, donde “se están renovando los techos y refaccionando las instalaciones eléctricas y sanitarias, entre otras mejoras impulsadas con los aportes del Fondo Educativo”.
Los avances en la Escuela 57 incluyen labores de albañilería y pintura, beneficiarán a los docentes y a los 330 estudiantes que asisten a la “Brigadier Alberto Sola Claret”. También se está acondicionando un baño para discapacitados.
“Los chicos van a poder asistir a clases sabiendo que cuentan con un verdadero espacio de aprendizaje, con nuevas luces, sin filtraciones, ni humedad”, comentó el director del establecimiento, Pablo Molina. Hay 300 instituciones en Morón.
“A través del Fondo Educativo, seguimos renovando las escuelas para que los chicos puedan estudiar de la mejor manera”, advirtió el intendente. El martes, el ministro Sanchez Zinny pidió rendir cuenta del destino de los fondos en un Conurbano donde nadie rinde nada. En Moreno, donde estalló la crisis, Walter Festa gastó apenas el 1% en mantenimiento. El resto fue sueldos, ploteos y viajes de estudiantes. Todos firmaron actas de compromiso entre abril y mayo.
Ayer también circuló un documento con la planificación que hizo el municipio de Morón. Las obras, que arrancaron a principio de año con un relevamiento coordinado por la Secretaría de Planificación Estratégica municipal, incluyeron arreglos finalizados en el Jardín de Infantes N° 905, y la reparación del techo en el N° 903, ambos de El Palomar.
A su vez, la puesta en valor continúa en el edificio donde funcionan la EP N° 4 y la EES N° 50, de Morón, donde se realizan tareas de pintura; en la EP N° 40, de Castelar Sur, donde se reparan filtraciones; en la EEP N° 12, en la que se renuevan los baños; en la EEP N° 102, de Morón, donde se colocan artefactos de gas; y en el Centro de Educación Complementario N° 801, de Castelar, en el que continúa la readecuación de la instalación de gas. Esto no quiere decir que hay establecimientos con problemas, por falta de gas o pérdidas de agua e instalaciones defectuosas. Hay de hecho edificiones que no se retomaron. Pero se cuentan con los dedos de una mano las escuelas cerradas por la emergencia.
La realidad en Ituzaingó es muy distinta. Hay directoras de escuelas, docentes y padres de alumnos que salen a cuestionar todo y que no apuntan solamente a las Provincias. “La responsabilidad es de las escuelas”, intentró frenar en seco el reclamo vecinal el intendente, Alberto Descalzo, en una reunión a la que asistió después de ir a sacarse fotos y promocionar el renovado Registro Civil de las Personas, junto al ministro de Gobierno de Vidal y sin poner un peso.
“En qué se gastó la plata”. “Hace 30 años que prometes las cloacas”, le imputaron. Hay una escuela de V. Udaondo que cerró por tener los baños tapados. La directora es militante K y ex funcionaria municipal. Finalmente fue un boomerang.
Ayer, en una suerte de asamblea, el intendente de Ituzaingó se tuvo que comprometer a invertir 10 millones en el mantenimiento de escuelas. Salió a decir que eran recursos propios y que la Provincia no había cumplido con el acta firmada en mayo. Su hijo Pablo, jefe de Gabinete, se vendió solito al confirmar en una entrevista que parte de ese compromiso implicada hacer cuatro cuadras de asfalto. Una obra municipal y que se llevaba el dinero para reparar escuelas.
De todas formas, el acta “se cayó” y nada se invirtió aparentemente. Fueron más de 30 palos que bajaron a Ituzaingó del Fondo Educativo este año. El Consejo Escolar es conducido por el PJ. A decir verdad no dan abasto por la ola de reclamos. Al menos una docena de colegios siguen cerrados. Por eso los padres explotaron y le fueron a pedir alguna explicación.
“Hasta el momento, el municipio ha recibido $ 30.284.564 en concepto de fondo educativo que debe ser invertido en infraestructura escolar a partir de la ley de presupuesto de 2018. Las obras comprometidas en el acta acuerdo que se firmó hace varios meses aún no fueron comenzadas por el municipio”, se quejaron los consejeros de Cambiemos Mariana Torres y Juan Pablo Montenegro. Suscribió el radical Nahuel Antuña, coordinador local de Políticas Socio educativas.
“Durante estos dos años y medio de gestión de la gobernadora Vidal se han invertido $ 21.000 millones en más de 6.000 obras contra cero pesos en los años 2014 y 2015 de la gestión anterior. Durante años las escuelas estuvieron abandonadas. Falta mucho por hacer y estamos en ese camino”, advirtieron. Los padres desesperan. No hay tiempo que perder.