Alberto lanza un paquete de medidas para contener la situación social en el Conurbano

El gobierno prepara medidas «urgentes» para contener la situación de las personas que están fuera del sistema económico formal, donde el impacto de la cuarentena obligatoria pega más duro. Los ministros de Desarrollo Social, Daniel Arroyo y de Economía, Matías Kulfas, trabajan contrarreloj en disposiciones «sociales muy fuertes» que se implementarán en las próximas horas.

Alberto Fernández convocó a todos los intendentes del Conurbano para este lunes para discutir la implementación del plan. El cordón urbano que rodea a la Capital es la región que mayor cantidad de gente concentra en condiciones informales, al menos un 40 por ciento de los 12 millones que viven en esa geografía. De ese porcentaje gran parte está «al día» y no tiene ahorros ni posibilidad de comprar comida o medicamentos si no trabaja.

Es por eso, que la Casa Rosada decidió implementar cuanto antes medidas extraordinarias de contención social y este lunes se publicarán en el Boletín Oficial beneficios para monotribustistas, taxistas y trabajadores «independientes», según confirmaron a LPO fuentes del Gobierno nacional. Un beneficio que también alanzará a los sectores más vulnerables de la Capital Federal, que viven una situación similar a los del Conurbano, ademas de estar interconectados y en permanente tránsito entre ambos distritos. Por eso las respuestas a la crisis se plantean para el «area metropolitana».

Por eso el foco está puesto en la contención social, para evitar que por las penurias económicas se disparen protestas, como las que se vieron días atrás en Ituzaingó. Las disposiciones que preparan Kulfas y Arroyo apuntan principalmente a trabajadores que realizan changas, personal doméstico y monotributistas, que son los más complicados con las medidas de aislamiento.

«Se trata de gente que el ingreso la cuarentena se los cortó a cero y no tienen resto económico para aguantar ni una semana», explicó a LPO un hombre clave del sur del Conurbano. Con un agravante, el hacinamiento que se vive en los barrios carenciados hace que en días de calor como los de este domingo y que se proyectan para toda la semana, a la gente se le vuelve materialmente imposible permanecer todos adentro de la casa, por lo que la circulación social en esas geografías es alta, aún en cuarentena.